En mi experiencia con Instagram, una de las cosas más complicadas es lograr que los seguidores no solo lleguen, sino que también se queden. He intentado crecer de manera orgánica, pero el proceso es muy lento y los resultados apenas se notan. Además, con pocos seguidores, mi cuenta no genera la confianza que me gustaría transmitir. Me pregunto qué ventajas concretas puede aportar tener seguidores reales y cómo eso cambia la manera en que otros perciben un perfil en la plataforma.